Este año, la declaración de la renta incluye novedades para quienes invierten en criptomonedas, ya que Hacienda ahora cuenta con más información sobre estas transacciones.
Las criptomonedas, también conocidas como monedas virtuales, son una opción financiera entre muchos españoles. Aunque siempre ha sido necesario declarar estos activos digitales, en 2024 la Agencia Tributaria ha intensificado la vigilancia sobre bitcoins y otras criptomonedas para prevenir la evasión fiscal y el fraude.
Es importante que entiendas las reglas para evitar problemas fiscales, nosotros te explicamos algunas de las claves:
¿Qué son las criptomonedas?
Las criptomonedas son activos digitales protegidos por cifrado para asegurar su titularidad y asegurar la integridad de las transacciones. No existen físicamente y se almacenan en una cartera digital. Se pueden comprar, vender o usar para transacciones, generando ganancias o pérdidas que deben declararse en la renta.
¿Cómo se declaran en la renta?
La tributación de las criptomonedas en la renta depende de la inversión que se haya realizado. Comprar criptomonedas no tributa en el IRPF, sin embargo, venderlas o intercambiarlas sí genera ganancias que debemos declarar. Deberás incluir todas tus operaciones con criptomonedas en la declaración de 2023-2024, como ventas, staking, airdrops…
La agencia tributaria ha destacado un apartado específico para los criptoactivos, el panel 18, en el que deberemos aportar la siguiente información:
- Nombre de la criptomoneda
- Tipo de transacción (compra, venta, staking, airdrops…)
- Valor de la transacción
- Costo de adquisición
Operaciones con criptomonedas: ventas, staking y airdrops
Las operaciones de ventas, staking y airdrops en el contexto de las criptomonedas tienen características y propósitos distintos. A continuación, se explica cada una y se señalan sus diferencias:
Ventas de criptomonedas
Esta operación implica la transferencia de criptomonedas de una persona a otra a cambio de dinero fiat (como dólares, euros, etc.) u otras criptomonedas. Las ventas pueden realizarse en plataformas de intercambio (exchanges) o de manera directa entre dos partes (peer-to-peer).
- Proceso: Se elige una criptomoneda que se desea vender, se establece un precio y se coloca una orden de venta en una plataforma de intercambio, o se acuerda directamente con un comprador.
- Objetivo: Obtener liquidez o ganancias en función de la apreciación del valor de la criptomoneda.
- Riesgos: Volatilidad del mercado, posibles comisiones en las plataformas de intercambio.
- Declaración: Las ventas de criptomonedas deben ser declaradas en la renta como ganancias o pérdidas patrimoniales mediante el modelo 100.
Staking
Esta operación implica «bloquear» una cierta cantidad de criptomonedas en una red blockchain para apoyar las operaciones de la red, como la validación de transacciones y la seguridad. A cambio de bloquear sus criptomonedas, los participantes reciben recompensas, generalmente en la misma criptomoneda.
- Proceso: Se eligen criptomonedas que utilizan un mecanismo de consenso basado en prueba de participación (Proof of Stake, PoS), se transfieren a una billetera que soporta staking y se «delegan» a un nodo validador o se bloquean directamente en la red.
- Objetivo: Obtener recompensas pasivas (intereses) en forma de criptomonedas adicionales.
- Riesgos: Fluctuaciones en el valor de la criptomoneda, posibles penalizaciones (slashing) si el nodo validador actúa de manera maliciosa o negligente.
- Declaración: Las recompensas obtenidas por el staking deben ser declaradas como rendimientos del capital mobiliario o intereses bancarios. Estos rendimientos se incluyen en la base imponible del ahorro y se declaran en el modelo 100.
Airdrops
Esta operación implica la distribución gratuita de criptomonedas a un gran número de billeteras. Los airdrops son comúnmente utilizados por nuevos proyectos para crear conciencia y aumentar la adopción de su criptomoneda.
- Proceso: Los desarrolladores de una criptomoneda envían pequeñas cantidades de su token a las direcciones de billeteras existentes, usualmente a aquellos que cumplen ciertos criterios (por ejemplo, poseer otra criptomoneda específica, seguir al proyecto en redes sociales, etc.).
- Objetivo: Promocionar un nuevo proyecto, aumentar la base de usuarios y fomentar la adopción.
- Riesgos: Airdrops pueden atraer a usuarios con intenciones exclusivamente especulativas, posibles ataques de phishing, baja calidad o falta de valor real del token distribuido.
- Declaración: Los tokens recibidos se consideran ingresos en especie y su valor debe ser incluido en la declaración. Tributan en la base general del IRPF y no en la del ahorro.
Cada una de estas operaciones tiene su propia lógica y beneficios potenciales, así como sus propios riesgos, dependiendo del objetivo y estrategia del usuario en el ecosistema de criptomonedas.
En definitiva, es importante entender cómo declarar las criptomonedas en la renta y así poder cumplir con tus obligaciones fiscales. Mantente al día con las regulaciones para evitar problemas con Hacienda.
En Santa Ana Asesores te ayudamos con este trámite, y esperamos que esta información te haya servido de utiliza. ¡Hasta la próxima!